viernes, octubre 26, 2007

Árbol

A las afueras de áquel bosque frondoso, había un árbol chiquito, de tronco delgado con pocas ramas y menos hojas.

De vez en cuando se acercaban a verlo, era tan diferente a los árboles del bosque, que llamaba la atención , pero solo por un momento.

Un día cuando el otoño corría a morir a brazos de su amante el invierno, un chiquilla se acerco, y vió que de su delgado tronco no paraba de manar sabia. Se quedó extrañada, y miró a su alrededor a ver si alguien podía explicarle qué es lo que le estaba pasando al árbol.

Cuando un pequeño gnomo tiró de su faldita.

- El árbol está llorando.
- Pero ¿por qué?
- Lo ves, tiene pocas ramas y en esas pocas ramas menos hojas, y ahora este otoño se las está llevando una a una...
- Pero eso pasa todos los otoños ¿no? se caen las hojas y en primavera vuelven a salir.
- Si, eso es cierto, eso le pasa a todos árboles, pero dime, ¿lloran los árboles?

Y la niña se quedó viendo como áquel árbol, lloraba por las hojas que habia perdido.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

el otoño es una estación preciosa. es el momento en que todo aquello que vive, deja caer los que ya no sirve, para recuperarse, tomar fuerzas, cambiar, aprender, descansar...y volver a nacer en primavera. Nuevos, vivos,fuertes.Asi es mi otoño, tiempos de reflexión...

Recomenzar dijo...

Me encanta el otoñ aunque aqui en Miami siempre es lo mismo sol y sol, con hojas en el piso

Nicolás dijo...

En este caso no es por que sea otoño, sino que en el "ábol" ha perdido hojas irremplazables, ni la misma primavera podrá sustituirlas.

Gracias Cat's.

MI Despertar. Me das envidia uff sol como lo echo de menos, lo necesito odio los dias grises y nublados, pero es cierto que un dia de lluvia en casa con una mantita y con alguien... bueno esa es de las hojas que se cayeron... snifff
besitos

tumejoramig@ dijo...

Es triste para el árbol perder las pocas hojas que lo cubrían, le vestían y le daban una belleza singular, pero estoy segura que en primavera, cuando sienta la fuerza de la savia recorrer su cuerpecito, cuando retoñen nuevos brotes y sus pocas ramas se hagan más, cargaditas de nuevas y pequeñas hojitas, sonreirá y se preparará para disfrutar de su nuevo vestido de fiesta con el que engalanar la vista de la gente que lo visita, y en verano revivirá, sabiendo que aunque pequeño, podrá dar un poquito de sombra a cualquiera que se acerque.
Es duro decir adiós, especialmente cuando pensamos que no habrán más "holas", pero mientras haya vida, hay infinitos "holas" por llegar, y es mejor esperarlos con la más bella sonrisa.
Me ha encantado tu cuento Nicolás, un beso, mantita y colacao calentito, mientras esperas la primavera...

NEBET-HET dijo...

Como ya escribi en mi blog... El corazon muere de una muerte lenta, se desprende de cada esperanza como si fueran hojas hasta que no queda nada.

No me extraña que el pobre arbol llore,como me gustaria poder evitar que perdiese mas hojitas, aunque estoy segura, de que en breve volvera a sonreir, porque recobrara todas las hojitas que fue perdiendo.

Un beso enorme corazon