sábado, febrero 26, 2005

Noches de Madrid



Ayer volví a salir depues de mucho tiempo. Las noches de Madrid ya olvidadas, amigos de hace tiempo, reencuentros, ¿cómo te va la vida? a mi me ha ido bien.... Unas cervecitas una cena y luego unas copitas. La noche de Madrid, palpita como un ente vivo, y se despiertan sentimientos olvidados, sale en mi el voyeur innato, mirar a la gente mientras tengo la copa en la mano, observar a las chicas ver sus movimientos, sus charlas, como son observadas por otros que se intentan acercar. dejo que la música entre en mi, y siento como el mundo se reduce al local, en el exterior no hay nada, nada existe, son las noches de Madrid, a veces más parecidas a un documental del National geographic, donde ves como son acechadas como intentan atrapar a la presa y esta huye despavorida. Nunca ha sido mi fuerte "entrar" a alguien , llámalo timidez, pero creo que me bloquearia en la primera frase y en mi mente se oiría el eco: "te esta mirando como un idiota moscón". Es una pena por que en parte pienso que se está perdiendo el arte de la seducción, un cruce de miradas, una descarga, volver a mirar, se cruzan los ojos ninguno baja la vista una leve sonrisa, si es a mi, un sonrojo, otra vez buscando con la mirada, ese juego me fascina, me embriaga... Una, dos, tres copas, hey amigo como vas?. Es hora de marcharse, mis inseparables cascos son mi compañia hasta casa, que placer poder volver caminando en la madrugada, hoy la noche está clara y luce la luna, hoy he sentido palpitar de nuevo la noche de madrid, con sus apretujones, con gritar en la oreja del otro para que te escuche, con conversaciones ahogadas por los decibelios, con esos precios por una copa... aysss que precios... y aún asi hay algo en las noches de madrid que me enamora.

jueves, febrero 24, 2005

Estas...




Suena la música del cine, la sala encendió ya las luces y en mi mente aun destellan las imágenes de la película.. la música me recuerda a un hombre pegado a su proyector mostrando a la gente del pueblo las escenas de mil sueños juntos, donde el mas pequeño sueña ser pirata, la mujer caer rendida en los brazos de un príncipe mientras une sus labios a los de él, el chico joven sueña con ver Nueva York, y la estatua de la Libertad, y el anciano sueña con volar como lo hace superman y ver allí abajo a su amor...
Lagrimas caen por el rostro del cámara, emociones guardadas en cientos de rollos de películas, y allí sentando ve a su publico, unos ríen otros aplauden y otros lloran, y el se siente como si desde su azotea les regara con sueños e ilusiones, con sentimientos y esperanzas.

Y mientras eso sucede en el mundo imaginario de los sueños... escribí.....

Y caminé por el Retiro, el parque olía a yerba, y en ella estabas tú.
El sol, tímido, se ocultaba entre las ramas de los árboles, mas algunos rayos traviesos jugaron en mis manos y en ellos estabas tú.

Un lago sin barcas, un banco sin gente, mas en ellos.... estabas tú.
Y caminé, y me senté bajo un árbol y te encontré en las risas de unos niños, en la mirada de un anciano.

Y las nubes jugaban al escondite con el sol, cerré los ojos y alli te imagine, con tu sonrisa con el brillo de tus ojos... vos viste que lindo parque?

Y vi parejas paseando de la mano, vi parejas acurrucadas en la yerba retozando y en ellas también estabas tú. Y te vi en sus besos, en sus caricias, en sus abrazos.

Y te vi en mi, y te vi en lo que me rodeaba, en mis pensamientos en mis sueños y en mis deseos y así te vi.

Y ahora camino de casa, cuando la noche cierra las puertas, y todo se oscurece, te buscare en mis sueños y entre mis sabanas y aun así sin hallarte se que te vi en ellos.

Y mientras llegas seguiré viéndote......en mi corazón.

Donde fueron a parar nuestros amores




Nieva en Madrid. Hace años que no veía nevar en Madrid, de pronto cae en mis manos una foto antigua de la última gran nevada. Está tomada en mi casa, en la que fue nuestra casa, la de mi ex y la mia. Los recuerdos se agolpan y pienso “donde fueron a parar nuestros amores”, creo que habré estado realmente enamorado una vez, y con indicios de enamoramiento dos a lo sumo tres, si exceptuamos ese cosquilleo del primer amor.
Y potencialmente enamorado alguna mas, pero ahora mirando esta vieja fotografía me pregunto que fué de aquellos amores, a mi ex la sigo viendo, aunque no reconozco la persona que tengo delante, algunos se perdieron en la niebla del tiempo, otros aparecen como hace dos veranos que me encontré con uno de ellos, nadaba junto a mi peque cuando reconocí unos ojos, el resto era mas difícil, la edad no perdona y tras cruzar unas palabras tampoco perdona el tiempo.
¡ Qué viejos nos hacemos cuando encontramos un amor pasado !
Siempre he sentido la pérdida de una persona como la pérdida de una parte de uno mismo, y más aún cuando es una persona a la que quieres, a la que te entregas y das algo de ti, algo doloroso que deja cicatrices pero prefiero estas a tener un corazón liso y pulido.
Imagino a alguno de mis amores casadas y con hijos ya camino de esa señora reconocible, a otra la imagino aún gritando consignas movilizándose por causas pérdidas, como ella que era una causa pérdida, y en general al resto con la vida sonriéndoles a mandibula batiente, deseando en lo mas intimo de mi ser haber sido un punto de inflexión en sus vidas.
En días asi, mientras caen los copos uno tiene la sensacion de taparse con la manta de los recuerdos, una canción puede llevarnos a otra ciudad a otro tiempo, quizas un baile, quizas una noche por las calles de Madrid, aunque para mi el sentido mas evocador es el olfato, la yerba mojada, o un perfume en la calle, han hecho que me pare pensando en esa persona, que me asalten sus recuerdos dejándome llevar por ellos. Viviendolos de nuevo. A todos ellos y por todo ello, gracias por haberlos vivido.

miércoles, febrero 23, 2005

Lolitas




Son un mito en el cine y en la vida real, creo que cada uno tiene su “Lolita” particular , la mía sin lugar a dudas es Natalie Portman en su papel de la película “Beautiful girls”.
Me identifico totalmente con el papel de Timoty Hutton, cuando embelesado ve a la vecinita de al lado una encantadora chiquilla que une la inocencia con la picardía. Esa mirada y esa dulzura me atraparon dejándome totalmente enamorado de ella. Hay una escena mágica, la reunión de amigos en el bar, cantando borrachos, pero sobre todas las cosas que esta película pueda desprender, amistad, celos y envidias, amores imposibles miedo a la relación destaca ese sueño intangible flotando en el ambiente de esa Lolita mágica.
Yo me sentí él, con el miedo a lanzarse a una relación en el abismo de olvidar una vida, para ser dos, y en ese abismo, una quimera lanzándose tras de él agarrándole de la cintura para que no diese el paso, una quimera vestida de uniforme de colegio, cándida y sublime.
Quizás despierte un sentimiento paternal de “arropar” y proteger, en cualquier caso creo que todos buscamos ese terrón de dulzura y amor.

martes, febrero 22, 2005

Frío




Estoy harto del invierno, de ese frió que entra y cala hasta los huesos. Del frió que llena las calles de este Madrid, que de un día para otro se convertirá en un horno sustrayéndonos la primavera.
Te odio maldito invierno.
Ese frió que nos convierte a todos en cebollas, nos envolvemos en camisas y jerseys, abrigos y bufandas. Y luego ya no sabemos quitárnoslas de nuestro corazón y de nuestra alma. Ves las caras sonrosadas por ese viento que acecha en cada esquina, y uno se encoge esperando que el calor no se vaya de nuestra piel, pero el frío sabe de resquicios y penetra, corre por la piel, para ir entrando por cada poro, cabalgando en la sangre hasta el corazón.
Te odio maldito invierno.
Que escondes al sol, para dejar que la oscuridad nos acorte los días. Que nos robas las calles, la risas el griterio, solo nos invade el atasco de esta ciudad, y ahora aún más desde que intentando darnos calor se nos quemó el Windsor.
al menos nos queda bucear entre las sábanas, arroparnos con el edredón, a la espera de que quizás una noche un cuerpo nos preste su calor.

lunes, febrero 21, 2005

Invierno



Hay veces que las lagrimas deberian escribir, seria como parar un poco el tiempo, como si alguien a mitad de una mirada se desvaneciera, así sin mas, y tu mirando al infinito a traves de ese cuerpo que acaba de desaparecer atravesándolo, y es entonces cuando las lágrimas aparecen cuando la soledad te abraza y allí, son ellas las que escriben.
Caen en las teclas y saltan de una a otra, sentimientos que suspendidos dibujan signos, trazos del corazon pintados con el pincel del alma. Alma que guarda los recuerdos y vivencias, surcos en su piel, como si los trazaras con un arado, solo que al final no recoges la cosecha, quedaran estériles esos campos, de cuyas tierras solo podrán nacer flores muertas, cuyas espinas se clavan en la piel, piel de la que la sangre seca no mana.
Y uno quisiera cerrando los ojos decir, simplemente, es tiempo de morir.

jueves, febrero 17, 2005

Sueños asesinos



Soñé un dia que un gato me arañaría en la cara, ahora tengo un hermoso perrito blanco.
Soñe un dia, que que me inundaban las letras, por eso ahora no tengo deudas.
Soñe un dia que me ahoga en un despacho y ahora trabajo al aire libre.
Soñe un dia que tenía un accidente de coche, ahora viajo en metro.
Soñé un día con la chica ideal, de aspecto latino sensual y dejé pasar a otras por mi lado.

Ahora tengo un perro de lana blanco.
Ahora vivo de alquiler.
Ahora voy al retiro a contar cuentos.
Ahora aprieto y me aprietan en la hra punta del metro.
Ahora vivo solo, y sigo soñando que tengo un hermoso sueño.....

A diario



Suavidad de un edredón. Ducha caliente. Café humeante. Galletas. Ropa limpia. Asfalto. Viaje en metro. Compañeros. Cascos, mp3. Uno, dos, tres cafés. Charlas. Trabajo.Manzana. Risas. Trabajo. Salida. Metro, Casa. Ordenador. Música. Leer. Jugar. Mando de tv. Películas. Cena. Cepillo de dientes. Teléfono. Amigos Cervezas. Dormir.

¿Y aún no nos damos cuenta de la suerte que tenemos, sólo cuando algo nos falta?

miércoles, febrero 09, 2005

El metro




Como si de una buena amante se tratara asi me siento atraido por el metro, una relación de amor y odio. Odio las mañanas cuando aún estoy amaneciendo, y el fuerte olor al gentio inunda mis sueños, evaporandolos del todo. Estación Atocha, un empujón, dos, tres, cuatro y ya tienes un hueco, un brazo en el costado, la hoja de un periódico llenándote la boca. "- Pero oiga, es que no se ha dado cuenta que no hay espacio ni para pestañear? y Usted ahí leyendo la prensa como si tal cosa?, Otra estación, es imposible pero dos personas más entran, Dios, donde está la Ley de Arquimides de Newton o cualquier otra ley, aqui se descubre que el espacio no es un lugar finito, que va, al contrario...

Sin embargo en las tardes, o en los trayectos donde uno puede disfrutar del viaje, es donde vuelvo a enamorarme del metro. Nunca me siento, quizás por la vergüenza que me da el levantarme para ceder el asiento, y sentir las miradas clavadas en mi. Prefiero escoger una esquina donde ver a la gente, y es alli entre estación y estación donde vivo sueños diferentes, el niño que mira embelesado la oscuridad del tunel, la señora con la vista perdida. "-Cuando llegue a casa tengo que hacer la cena, pero que puedo poner esta noche...". Los chicos ayyy los chicos, que lejos me quedan ya, sus risas su mala educación, su buena educación, pintados para la disco, risas, picardías, aire fresco. Y paras en otra estación, ¿Tendrá razon la ley de Murphy? por que mira que cuando vas pasando por el anden te fijas en las chicas que esperan entrar y justo se para el vagón donde no hay mas que hombres o chicos para entrar y... no entra ninguna chica? pero bueno, este Murphy... si es que tenía que ir dos vagones mas allá. Pero de vez en cuando te encuentras con una mirada azul o morena, tus ojos se cruzan se retienen un instante y en esa sutil brevedad de tiempo corre una energía, y centellean miles de fotogramas en tu mente, y crees en la vida y crees en el amor,entre estación y estación puedes vivir cien vidas que digo, doscientas vidas mil ilusiones. Llegas a tu destino, y aparece un lento The end, ella se va, sin nombre, sin pasado sin futuro, como una película en un cine de barrio. Y cuando sales del metro, todo queda atrás bajo tierra, hasta la próxima vez, que te odie o que me enamores, tú solo tú sabes como hacerlo querido Metro.

martes, febrero 08, 2005

Despedida



Abrí los ojos, y sentí un intenso dolor en el pecho, estaba oscuro y no podía ver lo que me ocurría. El dolor iba en aumento, me levanté y a duras penas pude acercarme a un espejo, cuando dí la luz pude comprobar que había un hueco enorme a la altura del corazon. Me dió miedo introducir la mano, no sangraba, de alguna extraña manera me faltaba una parte de mi. Miré debajo de la cama y entre las sábanas, en el salón y en el cuarto de baño, aquel pedazo debía estar en algún lado, y sin embargo no habia rastro de él. Me senté desolado en la cama, cerré los ojos y pensé donde podría estar, como un fogonazo me vino la imagen, unas manos conocidas me lo habían arrancado, sin miramientos, sin piedad, las manos de un amigo que había partido para siempre.

lunes, febrero 07, 2005

Los domingos



Odio los domingos, no sé si es algo psicológico desde pequeño, pero los odio, sobre todo los domingos por la tarde. Aún recuerdo aquellos domingos que quisieramos o no, teníamos que ir a comer a El Molar, como un ritual, despues de comer y su sobremesa, eterna siempre eterna, ibamos al pueblo a comprar carne y a la vuelta inmersos en la caravana insalvable, la radio, el carrusel deportivo y aquella voz.: pii piii piiii gol gollll golll en el Sardinero..... martilleaba mis odios mientras el coche apenas avanzaba unos centímetros.
Luego ibas creciendo y las tardes de los domingos se reducían a hacer todos los deberes que habías dejado pendientes desde el viernes, pensando que nunca llegaría el lunes. Y ya cuando empiezas a trabajar es la antesala al principio de los lunes, por que a veces parece que los lunes van a empezar las tardes de los domingos.
Ahora tengo un motivo más para odiarlos, cuando mi ex viene a recoger a mi peque, o yo lo llevo a su casa, la tarde del domingo se sumerge en la melancolía, la casa enmudece y en las paredes aún rebotan sus risas, más por donde mire sólo puedo encontrar vacios y huecos, la playstation en el suelo, su vaso de leche aún sin terminar, y algún dinosaurio que huye de mis pies...

Quien puede cambiarme los domingos, esos malditos domingos...

¿Por qué?



¿Por qué este blog, por qué sinlatidos? Quizás la primera respuesta sería y ¿por qué no?, pero esconderia una mentira, y es la necesidad de poder expresarme de escribir en algún lugar las vivencias, los pensamientos, las reflexiones y los sentimientos de un urbanita, algo particular, sabiendo que habra ojos indiscrretos, ojos invisibles leyendo unas líneas, morbo de pseudo vouyer? No, simplemente las ganas de compartir lo que uno lleva dentro, de lanzarlo, y quien sabe si de recoger algún que otro comentario.

¿Y empezar con un cuento? Por que en este cuento, reflejo, uno de mis motores, la búsqueda, aunque haya momentos en los que no sepa donde “escarbar” o “que me voy a encontrar, quizas un día pueda desaparecer y del hoyo salga... aquello que estoy buscando.

Un cuento ...



Escarbó en la arena, y empezó a hacer un hoyo, cuando se le acercaba la gente y le preguntaban que hacia, el sólo sonreía, quería llegar al otro lado del globo y la gente le tomaba por imbécil, pero él seguía y seguía.

Un día desapareció y nunca mas volvieron a verle.


...y del agujero salió un canguro.