A veces la vida es fácil, sencilla y suena como el sonajero de un bebé, pero otras, es un recoveco con mil aristas, un laberinto del que es casi imposible salir, un nudo gordiano, un electrodoméstico de última generación sin libro de instrucciones...
Y se te presenta así de sopetón, y te trae en su caja de regalo con lazo rojo, por qué sin ese lazo rojo no seria un regalo, lo que estabas esperando.
¿Esperando... ? Si suele llegar cuando menos te lo esperas
Pero no te lo pone fácil, por qué cuando lanzaste la moneda de la vida salió la del nudo gordiano, la del laberinto...
¿Porqué a algunas personas parece que la vida le sonrie y todo le es fácil?
Y a uno le toca, que la vida le entregue, esa que juega a esconderse, que se muestra pero no se deja atrapar, que está y no está, que dice que si pero es que no, y cuando es un no lo disfraza de si.
Quizás solo sea que inclinamos en exceso la balanza entre las expectativas y la realidad y en el lado de las expectativas añadimos nuestros sueños y nuestros deseos.
Puede que un día, mientras suena esa canción, la que alguna vez dijiste "es nuestra canción" la realidad salte al lado opuesto de la balanza y se de la mano con las expectativas se abrace a los sueños y se vista de deseo... y entonces la vida sera fácil, sencilla y sonará como el sonajero de un bebé
No hay comentarios:
Publicar un comentario