lunes, enero 08, 2024

Tiempo

 Es 1 de Enero, da igual el año, hace tiempo que el 31 de Diciembre es el mismo, las uvas (¿hay uvas?), los deseos para el nuevo año, la celebración...

Paseo temprano por unas calles que aún huelen a cava, a pólvora, tropiezo con deseos de un feliz año, y en las ramas de los árboles, ahora desnudas cuelgan los besos que caen en cuanto suena la última campanada.

Y allí en un banco de una plaza, está mi viejito, con una sonrisa cansada, como si quisiera irse donde sabe que ella le está esperando, pero aún tiene mil historias que contarme.

Me abrazo a él, y sin palabras le deseo... que voy a desearle, mi silencio lo dice todo.

- Vaya frio, tan pronto por aquí - me dice
- Bueno ya sabes... que te voy a contar de mis nocheviejas
- No te diré lo consabido de feliz año, que se cumplan todos tus sueños, toda esa palabrería que siempre me ha parecido tan estandar, tan... lo suelto y quedo bien.
Sólo te diré algo que todos sabemos pero no hacemos caso, o lo obviamos, el tiempo pasa, ya no vas a ser más joven, no te diré eso de y si fuera tu último año, porque eso no lo sabemos, pero si que es cierto que cada día que pasa eres un día mayor, y las ganas y las fuerzas no son las mismas, que estamos en el fin de semana de la vida y ya es viernes, y que mirar la vida a través de la ventana, no es vida, ya no es que tengas que hacer paracaidismo, o viajes de aventura, que sí, qué por qué no, pero es momento de no dejar pasar el tiempo, de hacer el amor en cada oportunidad que tengas, de pasar el tiempo con la familia, de compartir el tiempo con los amigos, de besar y bailar, de bailar y besar, de no guardarte un te quiero, de decirlo y escribirlo.
De arrinconar el miedo en una esquina, y decir lo que sientes, de saltar en los charcos, de ver el mar, de tumbarte al sol y cerrar los ojos, de vivir tus sueños, de que aunque haya días grises tengas consciencia de que tras las nubes se esconde el sol, de ver atardeceres al lado de la persona que amas, y si no está contárselo, por que cuando uno es feliz es cuando debe compartirlo con los seres que quiere.
Extrañamente, creemos que vamos a ser eternos, y dejamos para mañana lo que podríamos hacer y decir hoy, en este mundo donde todo es deprisa, y queremos que sea "para ya" a veces pensamos que no es el momento, no es la persona, por que se nos ofrece, como en un catálogo, más momentos, más personas, y perdemos oportunidades únicas que probablemente nunca más volverán.
No dejes que el tiempo pase, es lo único que no podrás comprar nunca...

Y me miró, como solo él sabe hacerlo, me dio un abrazo, y despacio se puso en pie, y caminó dirección de  la estatua del  ángel caído.
Le vi marcharse, y sentí un profundo vacío, temía perderle, pero también sabía que todos esos momentos que estaba con él, son regalos, que nunca se perderán.

Volví a casa, el cielo azul de mi Madrid, invitaba a pasear, y me perdí entre los caminos solitarios del parque del Retiro, ese mismo que un día me regaló una tarde inolvidable que guardo dentro de mi.


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