martes, marzo 31, 2009

Otro encuentro con el viejito

Hoy ha hecho uno de eso dias que Madrid, renace, el sol se desviste de sus nubes, y el cielo enseña su camison azul, las calles llaman, las chicas vacian sus armarios, y la gente abandona sus guaridas.

Y subi en un paseo interminable hacia el rastro, me encanta ver las ventanas abiertas de par en par como si invitaran a miradas indiscretas, como si invitaran a que la vida se siente en la mesa.

En la plaza, tenderetes que huelen a marruecos, a la india, sandalo y cuero, collares, camisetas, plantas, brazaletes, y gente, gente de fuera mezclando lenguajes, miradas curiosas. ¿cuanto vale? lo piensas y sigues buscando...

Y sigo mi camino, me pierdo, ahora hacia la plaza Mayor y alli la venta cambia, ahora son sellos y monedas, preparativos para el dos de mayo, ...parate, quieto, y alguien inmortaliza la fachada con una sonrisa.

Me gusta el ambiente, la gente se sienta en la plaza, estatuas vivas, un tango, un vaquero, una bruja que cambian sueños por monedas.

Bajo hasta la Puerta del Sol y como un guiri más, me acerco al oso y el madroño y allí me lo encuentro, mi viejito, en sus arrugas se nota el paso por el hospital, su tez mas blanca de lo normal, pero en sus ojos se refleja esa alegria por la vida.

- Hola, ¡¡ cuanto me alegro de verle de nuevo por aqui!! ¿qué tal está?
. Bien ya me encuentro mejor, algo cansando aún pero disfrutando de este sol.
- Si, hace un dia precioso, ¿quiere que nos sentemos?
. Si sentemos nos por aqui, me gusta esta algarabia de la gente, parecen que salen de invernar, y bueno uno a pesar de ser viejo sigue admirando la belleza, y las mujeres nos muestran un poco mas de ellas.

Su sonrisa se vuelve algo pícara, y un brillo especial aparece en sus ojos.

- Y cuenteme que tal esta, ya no tendra que volver al hospital todo esta bien?
- Si,solo fué un pequeño susto, y alli uno se da cuenta del valor de la vida, y del peso del miedo.
- ¿del peso del miedo?
- Si, ese que nos impide vivir, allí en el hospital pude darme cuenta de que la gente no vive por que sienten miedo, a cada paso que dan, el miedo les atenaza. el miedo anticipa cosas que uno solo las tiene en su mente.
Miedo a perder el trabajo, y no disfrutas de los momentos que alli vives, miedo a no llegar a fin de mes, y no disfrutas de un pequeño capricho, miedo a perder a tu pareja, y anticipas todo lo malo, todo lo negativo y al final abandonas lo dejas, tiras la toalla, miedo a no levantar la mirada y ver que no hay que pensar en el futuro lejano ,quizas en mañana pero no mas alla, y entonces dejas de disfrutar de las cosas del presente anticipando las del futuro. Miedo de uno mismo, que solo atenaza y ata a esa persona que somos, y nos paraliza e inmoviliza.
Hoy no hacen falta cuentos, solo tienes mirar alrededor de ti, ¡cuantas personas viven en el miedo! y, o huyen o se paralizan, no ven que hay muchas mas cosas y prefieren aferrarse, anclarse, otros corren sin mirar atras, sin pelear, prefiriendo dejar todo sin pensar como si nada de ello hubiera existido.

Todas sus palabras iban cargadas de verdad, de esa verdad que cae por su propio peso. Le miré por unos instantes , y él siguió.

- Hay un miedo atroz a la muerte, y yo la espero, por que cuando uno llega a una edad, cuando los seres mas queridos te han ido abandonando sabes que mas tarde o mas temprano, llegara tu momento y te encontraras con ellos, sin miedo, es solo un transito una nueva sensación.
te contare el caso de un hombre, que un dia abrió la puerta al miedo, salía con una bella chica, diferente a él, y empezó a tener miedo, miedo,a que los sentimientos le vencieran y antes de que eso pasara el miedo anticípó las diferencias, anticipó problemas que solo existian en el propio miedo, y huyó de aquella situación sin mas, como quien pasa la pagina de un libro y ya no recuerda lo leido.
Y ese miedo anego los campos de la amistad, y tuvo miedo de perder a sus amigos y que esto le hiciera daño, que le conocieran mas alla. que se convirtiera en una persona vulnerable y el miedo anticipo la soledad, y al final se alejó y sus amigos fueron desapareciendo.
Y le entró miedo a que la muerte viniera a buscarle, y cerró ventanas por donde pudiera colarse, y cerró puertas por donde pudiera entrar, y el miedo anticipo la llegada de la muerte, que no lo tenía en su lista, pero tanto miedo le entró, que cuando pensó que la parca estaba buscandole, salió corriendo, cayó por las escaleras y se partió el cuello. Cuando la muerte lo recogió, mostró su sorpresa,
"no te tenia en mi lista hasta dentro de muchos años, tu solo te anticipaste"

Y sentí que yo tambien habia tenido miedo, miedo a no sentir, miedo a no aprender a lanzarme, a vivir sin pensar si hay red o no.

Y cuando me despedí de mi entrañable viejo, llené mi mochila con una enseñanza mas. Me puse mi ipod, disfruté del calor ya del mediodía y baje por la calle Huertas hasta Atocha, mientras dentro de mi conducia una excavadora que se llevase mis miedos bien lejos.

6 comentarios:

Maybe dijo...

Hola Nicolás, que dicha debe ser para ti poder compartir de esas pláticas con un sabio amigo; gracias por compartirlas con nosotros, sin duda muchos necesitamos de una excavadora interior para acabar con nuestros miedos.
Saludos.

ShAdOw dijo...

No es fácil sacudirse el temor cuando por años de una u otra forma se ha colado en tí, más que el miedo a la muerte, es a seguir viviendo, por eso hay ocasiones en la que vives con inercia, robóticamente,esperando llegue a su fin cuando tenga que llegar... pero son lapsos, porque hay veces que leyendo algo como lo que tú escribes,o escuchando alguna canción que te motiva, o quizá mirando a tu hermano en desgracia,te das cuenta lo afortunado que eres y te entran unas ganas de comerte el mundo y salir y no temer, y tu mundo cambia de color, tú le das el color, puede ser negro o arcoiris...

upss me deje llevar por la emoción... besos

Belén dijo...

Ese abuelo lo deberían nombrar patrimonio de la humanidad querido...

Besicos

suspiro dijo...

Aysss, el miedo a veces nos juega malas pasadas. Ese viejito como siempre tan sabio.
Besos

Paseando por tu nube dijo...

Me ha encantado tu paseo, porque yo suelo hacerlo siempre que me escapo por Madrid, lástima no conocer a ese amigo tuyo tan sabio para echar unas párrafadas con él.
Un beso

Mary dijo...

El miedo es tan irracional que sólo cuando ocurre algo que nos convence, nos creemos capaces de combatirlo para siempre. Es una sensación de liberación que me encanta, aunque hay que ser fuerte para ello!

Feliz Finde!